Verano: los programas mierder que nos acompañan

Verano: los programas mierder que nos acompañan

Verano: los programas mierder que nos acompañan

En verano hace calor. Bravo, Alexandra, de esto al premio Planeta hay solo un paso. No. Ahora en serio. Las olas de calor hace que estemos más cansados, atontados y zombies que de costumbre. Los productores de televisión, desde sus despachos con el aire acondicionado a tope, se han dado cuenta de este hecho y, sumado a la ausencia de neuronas que perdemos con las cervecitas en las terrazas, han decidido hacernos un pedazo de favor. ¿Cuál? Poner una programación acorde con nuestro estado, unos formatos mierder que sacan a la parrilla televisiva que, incluso en nuestro estado de amebas, podemos comprender sin ningún tipo de esfuerzo.

El otro día fui a la playa de El Saler en Valencia. Prometía ser una tarde fantástica bañándome, tomando el sol, con la compañía de unos buenos amigos y tinto en la neverita portátil. ¿El problema? Introducirme en el agua. Todo me empezó a escocer. Y cuando digo todo, es TODO. Como una buena chica fingí que no me picaba hasta el dedo gordo del pie derecho, pensando que yo era la única que estaba padeciendo una especie de hemorroides que se extendían por todo el cuerpo, hasta que uno de mis compañeros dijo: “Me escuecen los huevos y no estoy depilado”. Ahí estaba la prueba de que algo pasaba y no era que yo hubiese pillado hongos o algo por el estilo. Al día siguiente nos enteramos de que se trataba ni más ni menos de que nos habíamos bañado entre veneno de medusas. ¿Una tragedia? No. Ese hecho, como mínimo, nos convertía en inmortales. Habíamos superado una prueba al más puro estilo Saw, pero sin el muñeco ese vestido de payaso que tanto repelús da. Sin embargo, el lunes me di cuenta que seguía siendo una mera mortal cuando encendí la televisión, puse Telecinco y creí que me moría si seguía cinco segundos más viendo el reality veraniego. Por eso he querido hacer este listado sobre los tres programas basuras que nos han acompañado los últimos veranos, esas cacas que solo se atreven a poner en esta estación en la que tenemos a todas las neuronas trabajando en busca de la ráfaga de aire perdida.

Acorralados

Hubiera molado más una versión de la peli de Acorralado con Stallone persiguiendo a vida o muerte a los concursantes por un bosque

Acorralados fue la versión de Telecinco de La Granja. El reality consistía en encerrar durante alrededor de dos meses a un elenco de personajes populares en una casona rural situada en medio de una finca en la ladera de la Sierra del Sueve, en el pueblo de Lodeña perteneciente al concejo de Piloña en Asturias. Allí los concursantes tenían que retornar a la sencillez de la vida rural. Con un elenco de participantes muy variado, creo que lo más reseñable es que Álvaro Muñoz Escassi estuvo allí y, atención al dato, no fecundó a ninguna fémina y es el último trabajo de Leticia Sabater antes de volver a ser una virgen vestal tras su reconstrucción del himen.

 

Campamento de verano

Pedre, ese dios nórdico que fue capaz de plantarle cara a la Hormigos con el mejor grito de la historia de la tv

Un reality show low cost, idóneo para estos tiempos de crisis, que recogía el testigo de Gran Hermano 14. En el mismo, 11 concursantes – la mayoría procedentes de programas estrellas de Mediaset como Sálvame o Mujeres, Hombres y Viceversa- se trasladaban a la Sierra de Gredos, en Ávila, para convivir juntos durante la temporada estival.  Los perfiles de estos famosos eran de lo más dispares, desde la escritora Lucía Etxebarría a Kamele Marchante. Hubo muchos momentos que se quedaron en la retina, pero hubo uno que puso el colofón al programa mierder del verano. Estaba el grandísimo Pedre, concursante de Un príncipe para Corina, dando el pregón de las fiestas del pueblo que acogía su estancia, Mombeltrán, e hizo un discurso que seguramente no olvidarán en años. El gallego, gracioso hasta decir basta en el programa de Cuatro con esa prueba de amor en la que se lanzó de bomba al mar, se despidió con una frase un tanto “peculiar”, una promesa de futuro. “¡Me follaré a tus mujeres”, dijo. Literalmente.

Los productores de Telecinco deben pensarse que con "la caló" se nos derriten las neuronas y todo nos parece estupendo.

Pasaporte a la isla

Famosos marca Hacendado

Finalmente, llegamos a la última joyita de Vasile. Supervivientes le ha funcionado y mucho con Chabelita y Nacho Vidal como estrellas. La hija de la Pantoja y el actor porno le han dado muchas alegrías en forma de audiencias y han decidido alargarlo un poquito más. ¿Cómo? Ahora ya no sólo las pasarán canutas en la isla si no que también lo harán antes de pisarla. Como siempre, repiten fórmula, concursantes reciclados de sus propios programas, viejas glorias y mazizos para que se líen entre ellos al más puro estilo Gandia Shore. Eso sí, tiene su punto positivo, Mari Carmen, madre de Fran en la tercera edición de ¿Quién quiere casarse con mi hijo?, que podría transformar este reality en un programa de humor por ese desparpajo que le es innato.


En resumen, lo que está claro es que cuando Ana Rosa se va de vacaciones Telecinco se vuelve loco.

"Cariño, pon Telecinco a ver que hay"

O tal vez no y sus directivos lo hacen aposta. Tal vez son conscientes de que los días más largos están para disfrutar de la calle y, con estos programas, lo que busquen es que nos demos cuenta, dejemos de ser sedentarios, de pasar las horas postrados en el sofá con la única compañía del mando a distancia y disfrutemos del exterior, ese que en invierno no podremos pisar porque parece el muro de Juego de Tronos que tantos disgustos le ha dado a nuestro pobre Jon Nieve.

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Este artículo lo ha escrito...

Alexandra Manzanares

Alexandra Roma o Alexandra Manzanares Pérez (Madrid, 1987) es un periodista, guionista, directora de cine, escritora y, gracias a Glup Glup, columnista, ¿se comprende por qué necesita una doble... Saber más...