Hemos probado… ENERO´ 14

Hemos probado… ENERO´ 14
Cada mes probamos lo último en productos de belleza y los sometemos a nuestro particular control de calidad, que no se parece a ninguno de los que hacen en las revistas pero nos parece mucho más práctico.
Esta semana: Quick Dry Nail Lacquer, de Kiko, es decir, el esmalte de uñas de secado ultrarrápido
Precio: De rebajas, 1,90€. Precio habitual: 3,90
La prueba: dormir en posición de “mírala qué mona cuando duerme” y fregoteado posterior sin guantes de toda la cocina tras una cena informal en casa.
Es raro, muy raro, que lleve las uñas de las manos pintadas. No así las de los pies, que sea época de sandalias o no siempre van de etiqueta. La razón básica para que no suela pintarme las uñas de las manos es que no suelo disponer de tiempo para pintar y aguantar moviendo las manos o –peor aún- sin moverlas más de 3 minutos, así que siempre acaban con un rayón de lo más impresentable.
La semana pasada vi este esmalte a un precio más que bueno en una de las tiendas Kiko, así que cogí este rojo rojísimo, lo probé allí mismo y ¡sorpresa! En cuestión de segundos estaba completamente seco y brillante, así que me hice con varios colores y a casa a preparar cena, que tenía una velada con un par de amigas que me hacen amorosamente de conejillos de indias en la cocina. Tras su marcha, y sin haber consumido la habitual botellita de vino de estas veladas, me dispuse a pintar mis uñas con el primer escogido; el rojo rojísimo, también conocido popularmente como “rojo putoncete”.
La marca presenta 40 colores de esta variedad, desde los típicos rositas hasta atrevidos colores oscuros e incluso negro, en tonos brillantes. Creo que faltan opciones, como un plateado o tonos metalizados, pero quizás para la temporada primavera-verano la marca ofrezca otros tonos.
Dos trucos para las ineptas con la mano izquierda; esmalte transparente y/o decoración nocturna y posterior ducha mañanera.
Siempre, tanto en manos como en pies, aplico primero una base de esmalte transparente ya que algunos esmaltes tienen pigmentos tan fuertes que el color se queda aun cuando lo haya limpiado a la perfección, así que con este pequeño truco nos evitamos un teñido semi permanente. Y, lo más importante: si te sales de la uña al aplicar el esmalte transparente, no te has de preocupar por salirte de la uña cuando apliques el color ya que cuando se sequen, tiras de esa amalgama que se ha formado y quedan perfectas. También puedes pintártelas por la noche y por la mañana, con la ducha, se te irán los restos, dejándote unas uñas con el color en su sitio. Yo, como soy así de torpe, hago las dos cosas pero con la segunda opción me encuentro en muchas ocasiones que ese brillo que quedó al aplicar el esmalte quedó perdido entre las sábanas, así que esta es una de mis pruebas: el mantenimiento del brillo al despertar.
El pincel es de fácil aplicación. La verdad es que con una única pasada se cubre perfectamente toda la uña, por lo que la aplicación es fácil, más de lo imaginado por previas experiencias con otros esmaltes de la marca.
Una cosa muy importante en este tipo de esmaltes de secado rápido es, justamente eso, la rapidez de aplicación puesto que al contacto con el aire se seca tanto la uña como el pincel muy rápido, por lo que te puedes encontrar con pegotones (e ir convenciendo de que el esmalte 3D está de moda no funciona, te lo digo por experiencia), pero no sucede eso con este esmalte: es fluido y aguanta bien al aire, por lo que su aplicación no sólo es rápida, sino también efectiva.
El color es intenso y en este punto hice dos pruebas: la aplicación en capas finas y una aplicación única, más gruesa. En ambos casos, el secado es rápido, uniforme y para quedar un profundo color rojo sólo necesité dos capas finas. En este caso –lógicamente- el secado es más rápido aún y creo que es en este punto en donde más se destaca: al terminar una mano, ya estaba seca. Esperé aproximadamente quince minutos y me fui a fabricar sueños.
Duermo como un angelito, con las manos juntas y debajo de la cara, estilo recordatorio de comunión de los años 80, lo que me ha llevado a, incluso con otros esmaltes de uñas también de secado rápido, despertarme en más de una ocasión con lunares de colores por la cara, pero en este caso al día siguiente mi cara estaba impoluta y, lo más importante, el brillo de mis uñas permanecía casi intacto. Me levanté, me dirigí a la cocina y ¡oh dios mío! Ya no recordaba el desastre que era y que, encima, me tocaba limpiar en un tiempo record.
Si Ramsay llega a pillar mi cocina, me veo dentro de una caja misteriosa.
Café y manos a la obra. Lo que cupo en mi lavavajillas, ahí se quedó, pero la parte dura, el hard rock de la cena, aún estaba ahí expectante. A fregotear con nanas cacerolas, wok tradicional y despegar con fortaleza un culo de cacerola pegado para el posterior fregado de encimera, horno y vitrocerámica. Sí, sin guantes, que me gusta vivir al límite. Y, total, si se te estropea una uña en cuestión de un par de minutos lo tienes solucionado. Pero no fue necesario; cuando terminé y me prometí a mí misma nunca volver a realizar ese menú (por la cantidad de cacharros usados) mi sorpresa fue que seguían impecables, tanto en brillo como en descascarillado. Prueba más que superada y sin necesidad de aplicar un protector.
El resultado: Aunque sólo he probado el rojo meretriz, el resultado ha sido más que satisfactorio. Espero que el resto de colores sigan su estela.
Evaluación final: Estoy realmente encantada. Tras cuatro días de vida normal, incluyendo bastantes horas tecleando en el ordenador –vale, admito que no soy un ama de casa que esté todo el día fregando, haciendo camas, comprando y cocinando- el esmalte sigue ahí, en su apogeo. Dura bastante, el acabado es brillante y cumple lo que promete; una gran rapidez de secado con un buen acabado. Y a un precio bastante económico (1,90€ en promoción) es un must en todo set de manicura/pedicura que se precie.
Kiko es una marca de cosméticos italiana que además no experimenta con animales. En España tiene muchísimas tiendas distribuidas por toda la geografía, especialmente en centros comerciales pero si no hay en tu zona, no te preocupes, puedes comprar por internet en http://www.kikocosmetics.es/ y los gastos de envío del primer pedido son gratuitos.
Este artículo lo ha escrito...
Eva Campos Navarro (Guadalajara, 1977). Es psicóloga, coach y escritora, colaborando con diversos medios de comunicación. Autora de “Soy más lista que el hambre” y “Alicia en el país de las... Saber más...