Yo de Facebook, tú de Twitter y él de Instagram
Yo de Facebook, tú de Twitter y él de Instagram
Está surgiendo una nueva generación de exhibicionistas sociales que se caracterizan por poseer grandes dosis de narcicismo que les impulsan a mostrarse al mundo a todos los niveles: físico y mental.
El exhibicionismo ha sido catalogado por los estudios psicológicos como una tendencia patológica a mostrar los propios órganos genitales en público. Lo que sucede es que con el auge de las redes sociales el término se ha visto ampliado para abarcar aquello que inicialmente quedaba fuera del mismo. Y es que surge una necesidad de definir la inclinación de ciertos individuos a exponerse en público de forma espontánea, excesiva y continuada.
De un tiempo a esta parte, es misión imposible abrir las redes sociales sin enterarte de que fulanito va estreñido o de que menganito acaba de realizarse una vasectomía. Si el tal fulanito tiene un buen día, hasta el posible que suba una fotografía como prueba visual del hecho.
Ante esto me pregunto, ¿qué ha sido de los primeros exhibicionistas? Aquellos que mostraban el respeto de enseñarnos sus partes nobles y que no nos obligaban a leer sus parrafadas o a escapar a toda prisa de sus grupos de Facebook.
Y es que la cosa no se queda solo en eso, ¿quién no está hasta la nariz de recibir invitaciones a juegos que no le interesan, de páginas a las que dar Me gusta y a las que no se le encuentra sentido por ningún lado? Culpo a 300 de mis altas expectativas en cuanto a abdominales (5946 personas les gusta esto), Cómo cojones se dobla una sábana bajera (3990 personas les gusta esto), ¿Cómo quiere que le corte el pelo? En silencio, por favor (14.318 personas les gusta esto), Yo también me quedé aislado porque mi madre fregó el suelo (146.1885 personas les gusta esto)… Y ya no hablemos de los grupos cerrados: Odio la aplicación Amigos en revisión, por los que dicen que YA VAN LLEGANDO cuando apenas están saliendo de su casa, Me acabo de dar cuenta que el logo de Carrefour es una "C" blanca, creo que las palomas traman algo…
¿Quién no se plantea estás cuestiones? Menos mal que en Facebook siempre hay alguien dispuesto a mostrarnos el camino.
Parece que el mundo está cambiando, y lamentablemente, no a mejor. Hace unos años las teorías de la conspiración inspiraban grandes películas: Conspiración, El informe Pelícano…, novelas 1984, El Caso Bourne… Ahora nos limitamos a crear grupos de Facebook preguntándonos qué traman las palomas, conscientes de que el hecho de que dejen sus excrementos en edificios históricos implica que quieren acabar con la raza humana.
Otras redes sociales como Twitter tampoco se quedan a la zaga. Si tienes suerte es posible que te siga gente tan insigne como Dios, el Big Ben de Londres, El T-800 de Terminator o Chewbacca. Todo depende de la cantidad de tiempo y esfuerzo que le dediques a tu perfil.
Trendic Topic para saber lo que se cuece en el mundo sin tener que abrir el periódico.
Y es que el movimiento es tan llamativo que no solo la gente de a pie se ve absorbida por ellas. Incluso organismos como La Casa Real o los mismos que nos gobiernan, políticos y aspirantes, han sucumbido al poder de las redes y a la publicidad gratuita que les aporta. Y es que no hay nada que no sea capaz de venderse a través de las redes. Eso sí, no hay que olvidar que las redes son un arma de doble filo y que en ellas no se puede usar aquello de donde dije digo, digo Diego, ¿verdad, Zapata?
Todo es susceptible de ser vendido o notificado por esta vía. Hasta el punto de que en muchos casos nos enteramos de las noticias porque sus protagonistas suben imágenes a Twitter o Instagram.
Gracias a ellas hemos visto la evolución de embarazos famosos con los de Shakira y Piqué, la constitución de parejas inverosímiles o incluso nos hemos enterado del fallecimiento de alguno de los protagonistas del papel couché. En algunas ocasiones se ha tratado solo de una falsa alarma, porque señores, Twitter como todo hijo de vecino, de vez en cuando se equivoca. La infalibilidad no es una cualidad del ser humano.
Al final lo importante es que solo hay que recurrir al Trending Topic para estar informado de lo que sucede en el mundo. Eso sí, fíjate bien no te suceda lo mismo que a Paulina Rubio que confundió el hastag #Pau2015 (exámenes de selectividad) con un clamor popular a su persona.
Y es que una gran parte de la información con la que nos desayunamos proviene de fuentes como las redes sociales, porque el periódico lo abriremos poco, pero Facebook, Twitter, Instagram, Pinterest o Tumblr, las abrimos varias veces al día. Porque, amigos, ¿en qué íbamos a ocupar nuestro tiempo si no las tuviéramos? ¿Qué sería del deporte nacional del chafardeo y el cotilleo sin ellas?
Este artículo lo ha escrito...
Olga Salar (Valencia, 1978). Se licenció en filología hispánica porque era la manera más sencilla de engañar a su madre: su progenitora pensaba que se estaba sacando una carrera mientras ella... Saber más...