Los Juegos del Hambre: Sinsajo 2 (El pestiño final)
Los Juegos del Hambre: Sinsajo 2 (El pestiño final)
Hacía tiempo que esperaba ver el final de esta saga, después de tragarme sin querer las otras tres para ver si por fin pasaba algo emocionante de verdad. Pero no. No pasó.
Suele pasar. De esas veces que por lo que sea piensas que una peli va a estar a la altura con un final digno y épico en consonancia con el estilo de su saga, y acaba siendo todo lo contrario.
Después de ver Los Juegos del Hambre: Sinsajo 2 salí del cine (por suerte) con un cierto grado de decepción solo superado por mi grado de aburrimiento. Y además, esta vez con un muy alto grado de dolor debido a que para ir un sábado al cine es necesario vender varios órganos vitales. No puede ser que las entradas cuesten 10€ y que se quejen de que la gente no va al cine. Con estos precios, Netflix ganará la batalla seguro.
Pero volvamos a la película. He de confesar que lo único que me atrajo de esta saga cuando vi la primera peli fue que salía Jennifer Lawrence, así de débil soy. No es que me atraiga su físico especialmente, pero tiene algo magnético en su manera de actuar, que es lo que le está abriendo las puertas de la fama. De momento.
La película nos cuenta los pasos finales de los rebeldes de Panem, en su búsqueda de la liberación del pueblo definitiva. Para ello, contarán con la inestimable ayuda del Sinsajo (Jennifer Lawrence) que con sus discursito televisados arengará al resto de los distritos para que apoyen su causa contra el capitolio. Un poco “Aragoniano” todo el asunto, pero se acepta.
Katniss andando por la calle después de decir que le sobra una entrada para ver a Muse.
Cuando el Sinsajo hace su trabajo y ya no es necesario, se da cuenta que hay alguien a quien le debe una, y es al Presidente Snow, que ha lavado el cerebro a Peeta (medionovioraro de Katniss). Este se ha vuelto un Demonio de Tazmania y en lo único que piensa es en cargarse a la buena de Jennifer Lawrence. Por lo que esta decide ir al Capitolio por su cuenta a intentar rebanarle el pescuezo a Snow. Y hasta aquí puedo leer.
Resumen del resto de la película: ZZZZZZZZzzzzzzzzzzzzz… y así dos horas más.
Jennifer Lawrence y Natalie Dormer protagonizando los sueños eróticos de millones de adolescentes.
La película carece de ritmo totalmente. Hay secuencias que pasan muy rápido sin caer en apenas detalles, y otras que son largas y aburridas. Vemos repetida la misma conversación entre Peeta y Katniss unas 27 veces y todas las veces acaba de la misma forma. No encontramos en ningún momento un guión fluido para llevarte de una parte a otra de la película, pareciendo más bien un documental sobre la guerra cortado a trozos, que en los momentos de tranquilidad se convierte en intimista y pseudoromántico. Un truño.
El triángulo amoroso entre Katniss, Peeta y Gale (mejor amigo de Katniss) no funciona. Nunca. En ningún momento. Está más que claro que Gale no la va a tocar nunca ni con un puntero láser a menos que Katniss se acerque en picardías y diciéndole “ven” con el dedo. Es frio como el hielo, y encima sabe que está muy muy muy dentro de la Friendzone. En cambio Peeta se ve fuerte, y sabe que tarde o temprano, a pesar de ser un puto loco, Katniss caerá. Lo sabe él... y lo saben todos.
Hola, bebés.
En cuanto a las interpretaciones, y a pesar de que hay actores de renombre en la saga, no vemos nada que nos llame la atención especialmente. Por intensidad desde luego que Jennifer Lawrence se lleva la mejor nota. Pero no hace tampoco un gran esfuerzo. La vi igual de aburrida de la saga que yo. Cabe destacar un error y un acierto. El error de esta saga es Julianne Moore que no puede hacerlo peor. Sobreactuada, desubicada y sin gracia en su papel de la lideresa de la rebelión. Y el acierto es Woody Harrelson, que a pesar de tener un personaje tosco y poco agradecido, le da un toque sincero y sentimental que hace que le cojas mucho cariño.
El argumento final que cierra la saga para mí no tiene gracia. La peli incomprensiblemente se alarga mucho en algunos tramos y se resuelve de una plumazo en otros. Escenas que parecen rodadas con prisas, o más bien cortadas por falta de tiempo en el metraje final. Demasiado diálogo para contar el triángulo fallido de amor, y muy poco para contar en profundidad el motivo verdadero de la rebelión y su desenlace. No llegué a cortarme las venas con la escena PREVISIBLE del final, pero me las marqué un poco.
"¿¿¡¡Quién coño eres y por qué te han dado este papel!!??"
Creo que en definitiva se quiso dar a la película un ambiente de desolación final, de sollozo multitudinario, de hecatombe descontrolada… y lo que acabó siendo fue un refrito repetitivo de Katniss andando entre cenizas y llorando por Peeta. Una lástima porque es un personaje que podía haber dado mucho de si en pantalla y no lo han conseguido.
Triste final para esta saga, que apuntaba maneras desde el principio, siendo amena y entretenida en sus dos primera entregas pero que al final, el desdoble de la última ha conseguido ser un error en lugar de un acierto. Y más después de ver el resultado nefasto en taquilla que demuestra dos cosas:
1.- La gente se cansa de las sagas alargadas de manera artificial.
2.- La gente se está quedando sin órganos que vender para pagar una entrada de cine.
Este artículo lo ha escrito...
Javi Del Campo (Madrid, 1983). Criado entre Steven Spielberg y Los Héroes del Silencio, de alguna manera estaba destinado a caminar sobre esa pequeña linea que separa al mitómano del friki. Amante... Saber más...